Shere vive en un faro, tiene alas y cuenta historias. Kurus recorre el mundo haciendo figuras de fuego.
Shere no debe acercarse al fuego ni a los hombres que hablan con él. Kurus no debe acercarse a las mujeres que cuentan cuentos, sobre todo, si tienen alas.
Shere y Kurus no deberían encontrarse. Pero se encontrarán y desobedecerán el sentido del deber, como tantos personajes de tantas historias que cambiaron las reglas.
Una bella historia sobre el alcance de la tradición, el amor, la obligación y la literatura.